Los principales estudios y plataformas, incluidos Disney y Netflix, se han enfrascado en el diálogo con el sindicato de guionistas, el Writers Guild of America, que advirtió que se declararía la huelga a partir de la medianoche de este lunes si no se lograba llegar a un acuerdo.
Los guionistas exigen salarios más altos y una mayor participación en las ganancias de la distribución de contenido a demanda a través de internet, pues dicen que les cuesta ganarse la vida con salarios devaluados debido a la inflación, mientras sus empleadores lucran y aumentan los salarios de sus ejecutivos.
Otro punto que pelean es la fórmula de pago a los guionistas por las series difundidas en plataformas, que en espacios como Netflix suelen permanecer visibles por años.
Desde hace décadas, los guionistas cobran “derechos residuales” por la reutilización de sus obras, un porcentaje de los ingresos de los estudios por la película o el programa, o una tarifa fija cada vez que se reproduce un episodio.
Pero con el streaming, los guionistas obtienen un pago anual fijo, incluso si su trabajo alcanza el éxito con cientos de millones de espectadores, la paga sigue siendo la misma.
Por el otro lado, los estudios, representados por la Alianza de Productores de Cine y Televisión, señalan que los “derechos residuales” pagados a los guionistas alcanzaron un nivel récord de 494 millones de dólares en 2021, frente a los 333 millones de dólares de hace diez años.
Como hasta el momento no han llegado a ningún acuerdo, más de 11.000 miembros del Sindicato de Guionistas de Estados Unidos se declararon en huelga este martes por la mañana por primera vez desde 2007.
La última vez que hubo un conflicto gremial de este tipo en Hollywood, los guionistas pararon por 100 días, lo que le costó a la industria del entretenimiento de Los Ángeles unos 2,000 millones de dólares.
Si bien los miembros del sindicato se encuentran en huelga dede las 3 a.m. de este martes, el sindicato de guionistas tuiteó que no establecería piquetes en las calles hasta este martes por la tarde.
Gracias a la huelga, los programas nocturnos de entrevistas podrían detenerse de inmediato, y las series de televisión y las películas programadas para estrenarse a finales de este año y en los meses siguientes podrían sufrir grandes retrasos.